Con las aerolíneas centradas en los costes de combustible tras las recientes subidas de precios, el Grupo Lufthansa se beneficia de una tecnología de flujo de aire de vanguardia diseñada para mejorar la eficiencia del combustible. AeroSHARK, un revestimiento funcional del fuselaje que aprovecha las propiedades biológicas de la piel de tiburón, ha dado recientemente un gran paso hacia su utilización en las operaciones de las aerolíneas comerciales.
La "magia" de esta ciencia consiste en el uso de riblets, costillas microscópicas en forma de prisma que cubren la superficie de la película AeroSHARK y pueden estirarse hasta una altura de 50 micras. Lufthansa Technik (LHT), la división de ingeniería de la aerolínea de bandera alemana, está al frente de la investigación y el desarrollo de la tecnología, dirigida desde su base de Hamburgo por los directores del proyecto AeroSHARK, Jens-Uwe Mueller (comercial) y Oliver Oeser (desarrollo).