
El abrasador desierto del norte de Egipto y Libia puede ser una trampa mortal para cualquier aviador que se vea obligado a caer en él, como la Luftwaffe se dio cuenta rápidamente tras unirse a sus aliados italianos en la campaña del norte de África a principios de 1941. Esta comprensión llevó a la creación de una de las unidades aéreas alemanas más fascinantes de la Segunda Guerra Mundial, el Wüstennotstaffel, o Escuadrón de Rescate en el Desierto.
Dirigida por el inspirador Staffelkapitän Heinz Kroseberg, esta unidad única sirvió como "comodín" para Erwin Rommel y la Luftwaffe en el norte de África. En sus dos años de agitada existencia, la Wüstennotstaffel se labró una excelente reputación por su capacidad para realizar el trabajo con su extraordinario avión de despegue y aterrizaje cortos, el Fieseler Fi 156 Storch. Rescató a cientos de aviadores del Eje y de los Aliados varados en el desierto, evacuó tropas heridas, transportó soldados, suministros y comandantes, inspeccionó aviones enemigos estrellados, realizó reconocimientos del campo de batalla y ayudó a cazar patrullas del Servicio Aéreo Especial y del Grupo de Largo Alcance del Desierto.
El Generalleut