Desde que el Proyecto Centurion de tres años y 425 millones de libras concluyó a finales de 2018, los Typhoon de la RAF tienen un mayor arsenal de armas al que recurrir. Esta última transformación de capacidades está diseñada para aumentar la ventaja de combate del Typhoon hasta su fecha de fuera de servicio en la década de 2040. El Typhoon FGR4, antaño el reino del Tornado GR4, es ahora la columna vertebral de la RAF en el mantenimiento de las misiones regulares en curso y las de contingencia. Por supuesto, también está la combinación del F-35B de la Royal Navy y la RAF, que actualmente cuenta con una gran capacidad, pero una fuerza pequeña. Una fuerza centrada en el empleo de la incipiente capacidad de ataque de portaaviones del Reino Unido. Cuando está en marcha con los F-35B en su cubierta, el HMS Queen Elizabeth es un magnífico espectáculo militar. Pero hay que recordar que el 60% de los F-35B del ala aérea son del Cuerpo de Marines estadounidense. En consecuencia, los comandantes de la RAF que deseen desplegar la capacidad de combate de un jet rápido deben recurrir al Typhoon para llevar a cabo cualquier disparo necesario.
Ya en julio de 20