El avión asediado está más cerca de volver a los cielos con luz verde inminente
Tras más de 20 meses parado, se espera que el Boeing 737 MAX vuelva a los cielos esta semana.
Boeing está a punto de obtener la aprobación de la Administración Federal de Aviación (FAA) de EE.UU. para reanudar los vuelos de su problemático avión, y se ha informado de que el fabricante recibirá la confirmación mañana mismo (18 de noviembre).
La decisión se produce después de que otros organismos reguladores de la aviación mundial estén más cerca de permitir que el 737 Max vuelva a funcionar. En agosto, Transport Canada se convirtió en el primer regulador extranjero en concluir las pruebas de validación del tipo.
Al mes siguiente, la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA) completó su serie de vuelos de prueba para el avión. Se espera que la aprobación del regulador europeo se produzca poco después de que el fabricante de aviones estadounidense reciba luz verde.
En septiembre, Patrick Ky, director ejecutivo de la EASA, dijo: "Por primera vez en un año y medio puedo decir que hay un final a la vista para el trabajo en el MAX".
La organización espera levantar la inmovilización "no mucho tiempo" después de la FAA, pero las autorizaciones operativas de cada país podrían tardar más. "Estamos pensando en noviembre", añadió.
A principios de octubre, el administrador de la FAA, Steve Dickson, puso a prueba el avión de fuselaje estrecho realizando un vuelo de prueba, cumpliendo así su promesa de pilotar personalmente el avión antes de que la administración apruebe su regreso a los cielos.
La puesta en servicio del 737 MAX será una tarea ingente que no se producirá de la noche a la mañana. Los operadores que ya han recibido los aviones tendrán que completar los trabajos de mantenimiento y modificación, mientras que la formación de la tripulación tendrá que ser actualizada.
En cuanto a los aviones no entregados -que son más de 400-, Boeing perdió su autoridad para autoemitir certificados de aeronavegabilidad y exportación cuando la FAA revocó su permiso en noviembre del año pasado.
En su lugar, el regulador planea realizar inspecciones individuales en persona de todos los fuselajes, lo que podría llevar más de un año.
