El polivalente Boeing 757 sigue siendo inigualable cuatro décadas después de su primer vuelo. Mark Broadbent traza la historia de la "navaja suiza" de la aviación y considera las opciones de los operadores para sustituir a este todoterreno perdurable.
Ya sea para transportar a los pasajeros de madrugada a través del Atlántico, para transportar la carga entre los centros de carga o para llevar a los turistas a través de Europa, pocos aviones realizan una variedad de tareas tan grande como el Boeing 757. Si a ello se añade el transporte de personalidades, el apoyo a operaciones humanitarias o la prueba de nuevas tecnologías, no se puede exagerar la eficacia de este avión multitarea.