Aprovechando sus amplios conocimientos para aprovechar la enorme demanda posterior a la Segunda Guerra Mundial, los intereses empresariales de Freddie Laker se diversificaron rápidamente en la década de 1950, aunque con un éxito desigual.
Animado por el éxito de sus propias empresas, Freddie Laker se interesó por el crecimiento constante de otras compañías, como la especialista en transbordadores Silver City Airways y, en particular, Eagle Aviation. La empresa había ido ganando trabajos chárter y contratos gubernamentales para transportar suministros y tropas por todo el Imperio Británico. Laker decidió que este mercado creciente ofrecía suficiente espacio para la expansión y así resucitó Air Charter.
En febrero de 1951, Aviation Traders se hizo cargo de Surrey Flying Services y, en mayo, se compró a Eagle Aviation un Avro 685 York C1, G-AMGM (c/n 1355), para poner en marcha servicios de carga y pasajeros. Laker volvió a estar donde le gustaba estar, en el aire, y en julio compró un segundo Avro York G-AMGL, (c/n 1354), también a Eagle Aviation.
Laker evitó por poco la muerte en marzo de 1952 cuando el G-AMGL tuvo que realizar un aterrizaje forzoso en la aproximación final a Berlín, cuando los cuatro motores se pararon porfalta de combustible, pero su conocimiento del avión y su rapidez de pensamiento le salvaron el día. Bombeando los aceleradores, fue capaz de obtener suficiente combustible de las bombas de aceleración para impulsar el avión sobre una escuela, antes de llegar a descansar en una parcela. Aunque el fuselaje quedó destrozado, todos los que iban a bordo sobrevivieron con sólo pequeños cortes y contusiones.