La llegada del jumbo a finales de la década de 1960 revolucionó el transporte aéreo comercial. Se podían transportar más pasajeros que nunca en un solo avión: el Boeing 747 de doble pasillo y fuselaje ancho empequeñecía a sus predecesores.
Pan American World Airways (Pan Am) fue el cliente de lanzamiento, con un pedido de 25 aviones que se entregaron a partir de 1969. Esta participación temprana hizo que la aerolínea ejerciera una enorme influencia en el diseño y desarrollo del avión. Puede decirse que ninguna compañía aérea ha tenido desde entonces el mismo efecto en un proyecto aeroespacial tan importante.
Una vez que el 747 estuvo en servicio regular en todo el mundo, se hizo evidente que el fuselaje original tenía muchos más usos.
En 1973, Pan Am buscaba un avión que le permitiera volar sin escalas desde Estados Unidos a Asia y Oriente Medio.