Dos accidentes de Boeing 737 MAX en cinco meses, ambos con aviones recién entregados, se cobraron la vida de 346 personas y sumieron al entonces mayor fabricante de aviones del mundo en la confusión. Martin Needham, de Airliner World, traza el camino que llevó a Boeing al annus horribilis y considera cómo la inmovilización ha afectado a la industria de la aviación en general.
Cuatrocientos aviones almacenados. Costes previstos superiores a 18.000 millones de dólares. Un número creciente de demandas y negociaciones en curso con las aerolíneas en relación con las compensaciones. La inmovilización del Boeing 737 MAX es una crisis como nunca se ha visto en el sector de la aviación, que afecta no sólo al fabricante y a su cadena de suministro, sino también a las aerolíneas, a los arrendadores e incluso a los competidores. ¿Cómo es posible que una de las empresas más respetadas del sector de la aviación tenga que volver a certificar un avión que, al parecer, sus propios empleados han descrito como "diseñado por payasos que, a su vez, son supervisados por monos"?
Cuatro décadas antes
Boeing se ha enfrentado a problemas relacionados con la distancia al suelo del 737 desde 1979. Por aquel entonces, el fabrican…