El USS Tripoli regresa tras un exitoso primer despliegue en el Indo-Pacífico

El segundo buque de asalto anfibio de la Armada estadounidense, el USS Tripoli (LHA-7), regresó a la Base Naval de San Diego en California -puerto base del buque- con su dotación de Lockheed Martin F-35B Lightning II el 29 de noviembre, tras completar su primer despliegue operativo en el Indo-Pacífico.

Encargado en julio de 2020, el USS Tripoli opera como parte del Grupo Expedicionario de Ataque 3 (ESG-3) de la Armada estadounidense, que está activo desde 2007. En este despliegue inaugural de siete meses, el Tripoli ha visitado las zonas de operaciones de la 3ª y 7ª Flota en la región del Indo-Pacífico.

A bordo del buque se encontraban 16 F-35B Lightning II asignados al Escuadrón de Ataque de Cazas de la Marina 121 (VMFA-121) 'Green Knights', que participaron en ejercicios de entrenamiento como Valiant Shield 22 y Noble Fusion. Los F-35B también se unieron a las Fuerzas Armadas filipinas para participar en el ejercicio Kamandang 22, dirigido por Filipinas. Durante el despliegue, Trípoli también interactuó con activos de Japón y Singapur.

Amphibious assault carrier USS Tripoli (LHA 7) transits San Diego Harbor as the ship returns to homeport. Tripoli returned to Naval Base San Diego following its initial deployment to the US 3rd and 7th Fleets in support of a free and open Indo-Pacific.
Amphibious assault carrier USS Tripoli (LHA 7) transits San Diego Harbor as the ship returns to homeport. Tripoli returned to Naval Base San Diego following its initial deployment to the US 3rd and 7th Fleets in support of a free and open Indo-Pacific. US Navy/DVIDS

En total, las tripulaciones de los F-35B del USMC realizaron 2.052 horas de operaciones de vuelo y recorrieron 40.303 millas náuticas durante los ejercicios. Además de los países mencionados, el Tripoli también visitó Australia y Tasmania para realizar visitas portuarias programadas.

Al regresar al puerto de origen del buque, el contralmirante James Kirk, comandante del ESG 3, declaró: "Estoy orgulloso del Tripoli por el éxito de su primer despliegue. El buque y la tripulación están a la vanguardia, dando ejemplo y poniendo a prueba los límites del portaaviones de asalto. Los LHAs están diseñados para apoyar el futuro del Elemento de Combate Aéreo del Cuerpo de Marines, y el Trípoli ha hecho precisamente eso. Estoy ansioso por ver qué más pueden aportar a la lucha".