Los aeropuertos australianos se vieron muy afectados durante la pandemia, aunque quizá ninguno más que el de Melbourne (MEL). Este complejo, que es con diferencia la mayor puerta de entrada de la aviación del populoso estado de Victoria, es uno de los principales centros de operaciones del país. Sin embargo, los cierres continuos durante 2020 y 2021 han tenido un impacto significativo en la ciudad y en su aeropuerto. A lo largo de la pandemia, el equipo de MEL ha tenido que hacer frente a un total de 262 días de cierre, así como a más de dos años de cierre de las fronteras internacionales.
Cuando el cierre comenzó en marzo de 2020, MEL ya tenía comprometidos varios proyectos importantes de obras de capital. Estos proyectos, fundamentales para la longevidad del aeropuerto, tienen como objetivo modernizar y mejorar las instalaciones para seguir el ritmo del desarrollo previsto en Melbourne. Mientras la mayoría de las ciudades australianas crecen, la capital de Victoria está a la cabeza y está previsto que eclipse a Sydney como la mayor del país en 2027.
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